Marcel Broodthaers (Bélgica, 1924) no comenzó su actividad dentro de las artes plásticas hasta aproximadamente cumplir los cuarenta años, habiéndose dedicado anteriormente a la fotografía, la literatura, la poesía y la crítica artística. Pero una vez inmerso en la realización de obras de arte, también cultivó diversas disciplinas como la escultura, la pintura o el cine, además de realizar una serie de exposiciones concebidas como dispositivos de presentación de su propio trabajo. Así, su extraordinaria producción durante las décadas de los años 60 y 70, lo convirtió en uno de los creadores más importantes del panorama internacional, con una influencia que continúa vigente a día de hoy.
Fue en 1964 cuando Marcel Broodthaers decidió convertirse en artista visual. Desde aquellos primeros años se percibe, en toda su producción, una preocupación por dar respuesta a las preguntas básicas de las artes visuales, cuestionándose constantemente la idea de representación y producción.