"Antes de que se publicara el Laocoonte de Lessing, otras obras habían reclamado ya una distinción precisa entre las artes, como el Paragone de Leonardo de Vinci y las Réflexions critiques sur la poésie et sur la peinture del abate J. B. Du Bos, escritas respectivamente hacia fines del siglo XV y a principios del XVIII. Sin embargo, a diferencia del Laocoonte y su alegato en favor de un estatuto autónomo de la poesía, en dichas obras se sostenía la inferioridad de esta última con respecto a la pintura." Estos contrapuntos teóricos entre las artes figurativas y la literatura -según refiere Ana Lía Gabrieloni- seguirán nuevos derroteros durante el Renacimiento y el surgimiento del Barroco. Para poner en contexto dichos debates, les dejamos aquí un documental sobre el arte renacentista.
Continuando con la asunción del programa artístico por parte de la palabra polémica , rescatamos a continuación el famoso manifiesto de la revista Martín Fierro , publicado en el número del 15 de mayo de 1924, Buenos Aires, pp. 1-2. Si bien el texto aparece sin firma, su autoría suele atribuirse al poeta Oliverio Girondo . Frente a la impermeabilidad hipopotámica del “honorable público”. Frente a la funeraria solemnidad del historiador y del catedrático, que momifica cuanto toca. Frente al recetario que inspira las elucubraciones de nuestros más “bellos” espíritus y a la afición al ANACRONISMO y al MIMETISMO que demuestran. Frente a la ridícula necesidad de fundamentar nuestro nacionalismo intelectual, hinchando valores falsos que al primer pinchazo se desinflan como chanchitos. Frente a la incapacidad de contemplar la vida sin escalar las estanterías de las bibliotecas. Y sobre todo, frente al pavoroso temor de equivocarse que paraliza el mismo ímpetu de l...