En estos fragmentos del libro de Adolfo R. Posada Literatura, Pintura, Écfrasis. Historia conceptual del tópico ut pictura poesis (2019), vemos cómo los géneros de la poesía estaban marcados por distintos órganos sensoriales: el oído (la épica), la vista (la lírica). Esto da cuenta de los cambios de registro, es decir, del paso de la oralidad a la escritura y del impacto que ha tenido en los distintos géneros literarios.
"Dejemos establecido, por lo tanto, que todos los poetas, comenzando por Homero, son imitadores de imágenes de la excelencia y de las otras cosas que crean, sin tener nunca acceso a la verdad; antes bien, como acabamos de decir, el pintor, al no estar versado en el arte de la zapatería, hará lo que le parezca un zapatero a los profanos en dicho arte, que juzgan sólo en base a colores y figuras. […] Así también, se me ocurre, podemos decir que el poeta colorea cada una de las artes con palabras y frases, aunque él mismo sólo está versado en el imitar, de modo que a los que juzgan sólo en base a palabras les parezca que se expresa muy bien, cuando, con el debido metro, ritmo y armonía, habla acerca del arte de la zapatería o acerca del arte del militar o respecto de cualquier otro; tan poderoso es el hechizo que producen estas cosas." (Platón 1986: 466, 601a-602b).
Además de la analogía que Platón establece entre la pintura y la poesía por medio de la mímesis, el filósofo griego reitera la facultad del arte de las palabras a la hora de reproducir imágenes engañosas y su imposibilidad de expresar esencias puras e ideales, siguiendo el criterio de la aletheia.
Por otra parte, la consideración de la poesía como un arte más visual que auditivo demuestra, tal y como expresa Galí (1999: 311), que el engaño de la poesía, según Platón, “no radica en una percepción distorsionada de lo que oímos, sino en el contenido de lo que oímos”. En este sentido, el filósofo desvincula absolutamente la poesía de la música —arte que ensalza y en la que fundamenta gran parte de su teoría pedagógica—, concibiéndola, por consiguiente, como un arte imitativo, análogo a la pintura.
Apolo tocando la lira, anónimo.